¿Tú también te sientes inseguro cuando hablas en público?

Fíjate en que digo «también». Todos los que hablamos en público nos hemos sentido inseguros alguna vez. Es un sentimiento natural que no debe avergonzarte. La veteranía será la que con el paso del tiempo te proporcione la ansiada seguridad. Por tanto, acepta cualquier oportunidad, por modesta que sea, para hablar delante de una audiencia y date tiempo. Llegar a ser un buen comunicador es un proyecto personal de largo plazo. Los siguientes consejos te ayudarán en el camino.

NO TE SIENTAS MAL POR SENTIRTE INSEGURO

Sentirte inseguro ya es desagradable de por sí, así que no ganarás nada si, además, te reprochas esos sentimientos. Por supuesto, tampoco ayudará a que tu presentación resulte mejor. Acepta que te sientes inseguro y, acto seguido, concéntrate en hacer tu presentación lo mejor que puedas.

DATE ÁNIMOS

Si tu mejor amigo se siente abatido, ¿no intentarías animarlo? Por supuesto que sí. Compórtate igual contigo mismo. En lugar de decirte a ti mismo cosas del tipo «No lo voy a conseguir» o «Se van a dar cuenta de que estoy nervioso», piensa en qué le dirías a tu mejor amigo en tu misma situación… ¡Y aplícatelo! Sabes qué clase de cosas funcionan: «Sólo preocúpate de hacerlo lo mejor que sepas», «Todo saldrá bien», «Hazlo igual que lo hiciste durante los ensayos. Las horas de ensayo darán fruto, ya verás».

AVANZA PASO A PASO

Cualquier experto en motivación confirmará que contar con pequeñas victorias iniciales nos ayuda a mantenernos en la senda de la transformación que buscamos. ¿Cuáles son esas pequeñas victorias que te ayudarán a mejorar como presentador? Acostúmbrate a escuchar tu voz, por ejemplo. Al principio no te gustará oírte. A ninguno nos gusta, pero no te preocupes: en realidad, no suenas así. Lo importante es que escuches el audio de tus ensayos y notes cómo, poco a poco, vas eliminando repeticiones y vacilaciones, sonando más confiado, y mejorando tu discurso. Después, graba tus ensayos en vídeo y familiarízate con tu postura, con las expresiones de tu rostro, con la forma en que mueves las manos y los brazos. Y, a fuerza de practicar, te sentirás más seguro al darte cuenta de que cada vídeo es mejor que el anterior.

BUSCA EL APOYO DE QUIENES TE HACEN SENTIR BIEN

Sabes quiénes son esas personas. Amigos, familiares, profesores, colegas profesionales… Acércate a ellas en busca de ánimo, consejo o compañía. Por el contrario, aléjate de aquellos que suelen ir a buscar eso mismo en ti. También sabes quiénes son; esos que suelen contarte sus problemas, que tienden a ahogarse en un vaso de agua medio vacío…

CUIDA TU POSTURA

No lo dudes: tu inseguridad se manifiesta en tu postura. Amy Cuddy lo explica magistralmente en su célebre charla TED y nos ofrece la solución. Posturas de poder, que también son posturas de confianza. Yérguete. Haz deporte para fortalecer los músculos del abdomen y de la espalda que te permiten caminar cómodamente con la espina dorsal larga y la caja torácica elevada. Tu audiencia verá en tu postura la confianza que deseas transmitir y tus palabras resultarán más persuasivas.

CELEBRA LAS VICTORIAS

Alégrate por hacer las cosas bien. Sí, yo también creo que la humildad es una virtud, pero recuerda: «da al César, lo que es del César». Si crees que esa presentación en el trabajo delante de tus compañeros ha quedado bastante bien, que la conversación por teléfono con el cliente ha abarcado todo lo que querías explicarle… Date la enhorabuena. No hace falta que te regodees. Simplemente, sé consciente de que lo has hecho bien y sigue a lo tuyo. Pero no dejes pasar ninguna oportunidad para reconocer tus victorias cuando sucedan. No hacerlo sería ser injusto contigo mismo, ¿no te parece?

EVITA EL DIÁLOGO INTERIOR NEGATIVO

Mejor aún: destiérralo. No sirve de nada. Expulsa de tu conciencia esos pensamientos negativos que surgen una y otra vez a cuenta de las cosas más insignificantes. Vives con una persona en tu cabeza que dice ser amiga tuya cuando, en realidad, es el peor de tus enemigos. Date cuenta de que lo único que ha conseguido en todo el tiempo que lleva conviviendo contigo es que te sientas mal una y mil veces. Dale una patada en el trasero y niégate a escuchar una palabra más.

DIÁLOGO ABIERTO

¿Qué prácticas te han ayudado a superar la inseguridad al hablar en público?