En El Arte de Presentar empleamos el término «fluencia cognitiva» para referirnos al grado de esfuerzo intelectual necesario para comprender algo. Como ya hemos explicado en este blog, las diapositivas atractivas aplican principios de diseño que aumentan la fluencia cognitiva y reducen el esfuerzo de compresión. Esta característica, de paso, aumenta la probabilidad de que nuestra audiencia esté de acuerdo con nuestras ideas. Las diapositivas con fluencia cognitiva baja, por el contrario, tienden a provocar rechazo y menos acuerdo.

Hoy te ofrezco cinco consejos de diseño gráfico que harán más atractivas tus diapositivas y su fluencia cognitiva:

1Reduce la cantidad de información
Recuerda la máxima zen del diseño de diapositivas: Menos es más. (Y pido perdón a mis amigos practicantes de zen por trivializar el término como lo hacen habitualmente tantos publicitarios. Hoy en día las cosas no son simples ni sencillas; son zen, ¡qué le vamos a hacer!). Las diapositivas complejas son difíciles de comprender. Como regla general, retira elementos en lugar de añadirlos. Si sospechas que una diapositiva puede haberte quedado demasiado cargada, muy probablemente tienes razón. Aligérala. Menos es más.

2Agrupa la información
El cerebro tiende a agrupar los elementos que se encuentran próximos entre sí. Mejora la fluencia cognitiva de tus diapositivas aplicando el principio del chunking o códigos de color para agrupar elementos relacionados.

3Asegura el contraste entre el fondo y los elementos
Para que tus diapositivas se lean «como la seda», usa siempre colores de fondo y de texto que contrasten. Un contraste alto facilita la lectura y resalta lo importante.

4Identifica lo importante y destácalo
Te lo seguro: no todo lo que aparece en tu diapositiva es igualmente importante. Reflexiona e identifica los elementos que deben destacarse. Cuando nada destaca, todo compite por la atención de la audiencia con la misma intensidad. El mensaje principal de la diapositiva es más importante que el logo de tu compañía, que la fuente de la que provienen tus datos, o que el gráfico de barras tridimensionales con que lo ilustras. Recuerda el punto anterior y resalta lo importante para que contraste con lo accesorio.

5Alinea los elementos de la diapositiva
Cada elemento de la diapositiva debería estar alineado, como poco, con otro elemento. Una diapositiva en que los objetos parezcan volcados de cualquier manera sobre el lienzo, sin alineamiento ni disposición perceptible, parecerá desordenada y poco atractiva. Un consejo de los buenos: si quieres aumentar el atractivo de tus diapositivas, empieza a alinear todos sus elementos. Acostúmbrate a utilizar rejillas para organizar el contenido de tus diapositivas. Crea maquetas (PowerPoint los llama «diseños») para los tipos de diapositivas que usas más a menudo y trabaja a partir de ellas. Sabrás siempre dónde va cada elemento y no tendrás más que encajarlo en su sitio. Ganarás velocidad, darás una agradable uniformidad a tus diapositivas, y los objetos no darán saltitos cuando te desplaces por la presentación.

Para ampliar estas recomendaciones, te sugiero que acudas a su fuente: el magnífico libro de Bruce Gabrielle titulado Speaking PowerPoint, al que ya me he referido en anteriores entradas de este blog.

[Aprende todos los trucos de diseño gráfico que necesitas conocer para enganchar a tu audiencia con diapositivas atractivas en nuestro curso de Superpoderes del PowerPoint.]

DIÁLOGO ABIERTO

¿Cuál es tu truco favorito de diseño para dar a tus diapositivas un aspecto atractivo?

[Créditos:  Imagen de cabecera diseñada  para este artículo con elementos de Shutterstock]